jueves, 3 de noviembre de 2011

ES CUESTIÓN DE QUERER

Cuando los problemas nos dejan tirados en el suelo y te sientes triste y cansado y que no puedes más, les cuento que esto nos pasa a todos y como yo solo escribo lo que aprendo y lo que Dios me muestra para que yo también les enseñe a ustedes es algo tan sencillo… El querer, querer, esa simple palabra puede definirte ahora, si yo estoy triste me siento de lo peor por todos mis problemas y no doy más, yo soy la única que puede hacer que esto cambie si yo quiero sentirme bien lo puedo hacer sin ningún drama. Porque cuando pasamos por problemas y nos entristecemos ¿De qué nos sirve ponernos asi? De nada pues esa condición en la que te colocas te hace sentir inferior y que no puedes, así que basta de colocarte en victima de la situación y mostrale que vos podés más que ella! Vos mismo te tenes que plantear esto, darle un BASTA  al problema y como siempre digo si no se lo das vos primero, el te lo dará a vos. Así que yo no puedo seguir escribiendo y tratar de darte ánimo y decirte que podes si vos no querés. Para los que quieren hacer la diferencia y dejar el drama he aquí la solución. Y si sos de Dios y realmente crees en Él, sabes que Él es grande y lo puede todo, entonces por favor! Qué es lo que estas esperando! 
Porque todo lo puedo en Cristo que me fortalece.” Filipenses 4:14. Todos tenemos problemas pero también se que ni todos tienen a Dios como su Señor y Salvador por eso a muchos les cuesta dejar de sentirse mal y sin salida, pero hoy todavía, HOY si estas leyendo este mensaje tenés la chance de elegirlo, elegir a Dios, el puede ayudarte hasta en las peores situaciones y si vos hoy estás con Él, quédate seguro que no hay problema que pueda contra vos y el problema también HOY está seguro que con vos no se juega!. Yo ya elegí como sentirme hoy. ¿Y vos?

viernes, 28 de octubre de 2011

¿Qué es lo que hablas cuando estas enojado?

Hoy he visto algo que muchos no ven y que hasta uno mismo puede hasta cometer esa clase de errores que nos hacen no solo quedar mal delante de los que nos oyen, sino mucho peor, delante de Dios. Es el hablar de los demás y he notado que uno lo hace por muchas razones pero una de las más comunes es cuando uno está enojado con alguien. ¿Porque ahora no probamos en callar cuando algo así nos acontece? Les propongo algo, cuando nos enojemos con alguien, en ese mismo momento cuando queramos hablar de esa persona que nos enojo tanto solo nos apartemos y hablemos aquello con Dios y ahí veras que mal hubiera quedado si esa queja la hubiéramos llevábamos para un ajeno a la situación.

domingo, 11 de septiembre de 2011

El Perdón

         A un mes yo les había contado de un problema que había tenido con una de mis compañeras, y que en mi estaba el solucionar ese problema. Le pedí perdón por algo que no había hecho, no voy negar que las cosas con el tiempo empeoraban, así que también no voy a negar que me costo iniciar una conversación con ella para poder pedirle perdón por lo que sea que le había hecho. Hasta que llego el día en el que me anime tire a mi lado cobarde en la puerta y la hable, le dije que me perdonara si le había ofendido en algo o si le había hecho algo que la hizo sentir mal, pues no me gustaba estar así con las personas sin saber porque la distancia y la manera en la que me trataba no la entendía. Bueno… ella me dijo que no había ningún problema, solo que si había uno y ella no quiso decirme nada, pero en ese momento me sentí tan bien conmigo misma más allá de que ella no cambio mucho su trato conmigo, me sentí como liberada de mi conciencia mala delante de Dios por no haber hablado con ella. En ese momento tuve la certeza que agrade mucho a Dios por eso.

 Soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros.

Colosenses 3:13

miércoles, 13 de julio de 2011

¿CUAL ES TU REACCIÓN?

A veces es muy difícil mirar a las personas a nuestro alrededor como personas buenas, mas cuando ellas son envidiosas, quieren perjudicar todo lo que queremos hacer o nos tratan mal sin algún motivo aparente, aquí puedo decirles que es difícil pero no imposible hoy puedo hablar del tema porque sé lo que es tratar con personas así, para ser sincera y me apena decir que conozco a alguien así y, sí, a veces quiere sacarme de quicio, pero mejor es no responder, sé que cuesta mucho no hacerlo pero ahí también muestras el dominio sobre tu carne. Pero en ese momento cuando pensaba que había perdido la paciencia, Dios hablo a mi corazón: “Porque el siervo del Señor no debe ser contencioso, sino amable para con todos, apto para enseñar, sufrido; que con mansedumbre corrija a los que se oponen, por si quizá Dios les conceda que se arrepientan para conocer la verdad” 2 TI 2:24-25
En ese momento me sentí tan avergonzada por haber pensado en responder a las ofensas de esta persona, también propuse en mi corazón tratarla bien más allá que ella me quiera golpear xD, pues prefiero eso antes de llegar un día ante Dios y presentarme con manos manchadas ante su presencia. Y lo que sí puedo asegurar que yo cuidare de esa alma pero no permitiré que me falte el respeto pues soy de Dios no soy tonta, sé que suena un poco rudo pero es una de las cuestiones en la que debes saber diferenciar, lo mejor sería hablar y pedir perdón, quizás no hice nada para que ella reaccione de esa manera conmigo, pero voy a hacerlo porque me importa mucho lo que Dios piense de mi.
En la próxima publicación les cuento como me fue!
P/S: nunca veas a la persona que te agrede como una  amenaza por lo contrario mira con los mismos ojos con los que Dios te mira hasta cuando cometes errores pues somos humanos y cometemos errores. Y con respecto a las agresiones que suframos de parte de otros ten en cuenta que el diablo usa a los demás para herirte, no prestes atención a esas cositas sin importancia como estas, porque el diablo ve en las cosas que nos molestan para seguir provocando y ensuciar nuestro corazón.

miércoles, 29 de junio de 2011

ESPERAR EN TI

Si no avanzo en cualquier aspecto de mi vida la culpa es de Dios. Muchas veces he oído hablar esto, “yo doy y doy para Dios y Él nunca me da nada, mejor ya no voy más a la iglesia porque nada de lo que hago me funciona”. Pero en la realidad ¿Será que siempre diste para Dios, será que siempre hiciste lo mejor para Dios? Sinceramente no creo en un Dios mentiroso pues con esas palabras lo están llamando así, si en mi vida no aconteció nada de lo que esperaba evidentemente algo anda mal y no precisamente de parte de Dios, Él es el más interesado en bendecirnos. Cuando entregabas tu ofrenda, tu compromiso con Dios ¿Será que siempre diste lo que Dios te pidió, lo mejor? Porque dar cualquiera da, pero dar lo que Dios pide no muchos son capaces de hacerlo. ¿Y cuando tuviste que hacer una buena obra? ¿Hiciste realmente lo que debías de todo corazón o simplemente miraste para otro lado y fingiste no recordar que a Dios no le agrada que hagas cosas equivocadas? Muchos reclaman y no asumen su error, muchos hacen esto pero no hacen aquello, es necesario para caminar una vida con Dios hacer lo que Él mando no lo que yo creo o pienso, después de todo ¿Quien es tu Señor o quien dices que es tu señor? La vida está llena de desilusiones pero el verdadero hijo de Dios sabe hacer de un limón una rica limonada. Si yo tuviera que salir de la iglesia cada vez que atravesara por una mala situación o Jesús huir de la cruz porque iba a ser clavado, herido, azotado… ¿sigo? Y si aun pasaras por todo lo que nuestro Señor pasó no tendría justificación tus ganas de echarte para atrás porque las cosas se están poniendo difíciles, piensas que porque Jesús fue el hijo de Dios a él ¿No le dolió ser crucificado? ¿Sus llagas no le dolían, la sangre cayendo de su cuerpo al suelo no fue nada? Pero recuerda algo JESUCRISTO VENCIO AL MUNDO Y RESUCITO ENTRE LOS MUERTO Y FUE LEVANTADO EN GLORIA, PORQUE SU SACRIFICIO NO FUE EN VANO. Ahora piensa ¿Que fue lo que diste para Él? ¿Qué fue lo que hiciste por Él? Y si realmente hiciste un sacrificio sincero para Él, amiga, el lo ve y no mira para otro lado, solo está esperando el momento correcto para bendecirte, sus tiempos no son los mismos que los tuyos, pues Él sabe bien cuando te va  a dar esa sorpresa que tanto anhelas recibir de Él.
En la Fé y a NO bajar los brazos y SI a seguir este camino que ni todos transitan, sino un VERDADERO GUERRERO! ES HORA DE LEVANTARSE EN CONTRA DE LOS PROBLEMAS NO EN CONTRA DE DIOS SÉ UN GUERRERO, MILITANTO EN LAS BUENAS OBRAS! PUES LA VICTORIA NOS ESPERA!

SEÑOR TU ERES MI INSPIRACIÓN EN ESTA GUERRA!

sábado, 18 de junio de 2011

¿MI PROPIA VOLUNTAD?

Una vez después de tanto tiempo hice lo que tanto quería, pero me di cuenta que lo que tanto quería no era realmente lo que tanto necesitaba, fui en contra del Espíritu Santo que me decía que no lo hiciera, pero lo hice y sabes cómo me sentí después? Mal. Porque pensé que me haría feliz, claro que lo que hice no fue pecado pero no escuche cuando dentro mío Dios me decía que solo me traería dolor, pero así de terca fui. Hoy en día me gustaría volver el tiempo atrás pero sé que las cosas no funcionan así. Siento que deje de lado la voz de mi Dios para seguir algo que ni la pena valía ni valdrá, para ser sincera siento que estoy reconciliándome con Dios, el arrepentimiento sincero es una de las actitudes más importantes que pude haber tomado. Antes de hacer cualquier cosa, mi consejo es pensarlo bien y analizar bien que ganas y que perdes y si lo que ganas realmente es tan bueno como lo que perdes cuando pensas haber ganado algo.
Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios permanece para siempre. 1 JUAN 2:17

jueves, 2 de junio de 2011

Como orar cuando no tenemos ganas

A veces, ni yo siento ganas de orar – y yo soy obispo. Es normal. El ser humano es muy inconstante. Un día sientes que puedes conquistar el mundo. Al día siguiente, usted ni quiere estar en el mundo.
Sentimientos. Si viviéramos por ellos estaríamos perdidos.
Gracias a Dios hay una alternativa: hacer lo que tenemos que hacer, y no lo que sentimos ganas de hacer.
Cuando yo no siento ganas de orar, lo que yo hago es lo siguiente: Yo oro igual. Y observo que, así como muchas cosas en la vida, una vez que comienzas a hacer algo, el sentimiento viene enseguida. Moción precede emoción. A veces no siento ganas de comer. Pero cuando comienzo, quiero comer más… Tuve que comenzar a escribir este blog  antes de sentir ganas de escribir. Odio escribir. Yo adoro haber escrito.
Creo que ya cazo la idea.
Lo principal es tener por resuelto en su cabeza que usted absolutamente precisa orar. No es una opción. Claro que para mucha gente lo es (porque ellos no saben lo que están perdiendo), pero no para usted. Las consecuencias serian mucho peores de lo que el pequeño esfuerzo que usted tiene que hacer para orar.
Tal vez no hayas hablado con Dios últimamente. Pero ha tenido ganas de hacerlo. No hay problema. ¿Estás solo ahí ahora?  ¿Puedes ir a algún lugar privado? Entonces deje de leer esto y haga una oración. Dos minutos o veinte – no importa. Diga lo que usted tiene que decir y pronto.
Después vuelva aquí, y agregue sus comentarios sobre cómo te has sentido después de haber hecho eso.

Obispo Renato Cardoso

martes, 17 de mayo de 2011

La Revolución

Muchas veces el ser humano precisa revolucionarse, con la vida económica, con la vida sentimental, con la vida espiritual sobre todo de uno mismo! Digo esto porque yo he sido una persona que hacia las cosas con mucho miedo temerosa de fallar pero las cosas salían peor, necesitaba salir de mi misma, ser otra y a la vez ser por fin yo, aquella persona escondida detrás de la miedosa, la número uno de Dios, pues he aprendido que soy esa misma desde el vientre de mi madre, cuando aún era un espermatozoide por ese numero uno estoy aquí, naci para vencer no para ser vencido y el mundo no me puede decir que no soy nada porque yo sé quién soy  y a donde voy, mi objetivo ya está declarado delante de mi Dios y Él la afirmará. El secreto del éxito es ser una persona indignada no acomodada pues el que realmente sabe lo que quiere, es ambicioso, tiene una visión como la que Dios le dio a Abraham la misma que atraves de el nos enseño que usemos, entonces ya tenemos las armas necesarias, la fe, la palabra, la indignación entonces es hora de sacar del armario la armadura de Dios y luchar por lo que tenemos y que por derecho como hijos de Dios nos pertenece. Hoy pueden decir: “ella no puede. Ella es débil. Es menos que yo.” Pero hay alguien más grande que ellos dándome ánimo diciéndome: “Antes de formarte en el vientre de tu madre, yo te escogí. Antes de que salieras del ceno materno, te consagré. Como luz del mundo te constituí. No tengas miedo, que Yo estoy contigo” Jr 1,5.8.
Porque desde la humilde condición de humano puedo decir si Dios esta conmigo quien contra mi, si Dios esta delante de mi quien se atreve a decirme ahora que no soy nadie? En la fe!
Con Él No hay como perder!

Que Dios los bendiga mucho!

martes, 12 de abril de 2011

OBEDIENCIA

Desde que decidí obedecer pero obedecer con todas las letras Dios, fue muy difícil para mí, a veces yo tenía ganas de ir a la iglesia y mi papá decía que no, justo el día más importante para mí (DOMINGO) se imaginan lo que es? Toda mi vida había ido a la iglesia por más que mis padres me decían que no pero llegaba y no sentía el mas mínimo peso en mi de que había hecho algo que había desagradado a Dios, pues pensaba que el colocar en primer lugar a Dios era eso ir en contra de mis padres pero, algo raro paso en mi, algo que me cambio totalmente mi ser. Cuando mamá enfermó y cayó en cama era un día sábado en el que yo había dicho que iría para trabajar como obrera, pues ese día no habían mucho obreros en la iglesia y como había dicho a Dios tenía que ir y cuando estaba decidida a salir a mamá la tenían que llevar al hospital y yo no la acompañe me fui a la reunión y no supe nada de ella, en ese momento también había creído que hacia bien, pero algo en mi me habló más fuerte con mi tristeza diciendo NO! Cuando llegué a casa vi el fruto de mi mal  obra y que eso no era lo que Dios quería de mi, papá estaba tan enojado conmigo que no podía ni  mirarlo a la cara, me dijo tantas cosas y tan duras que solo quiero recordar para no volver a hacer eso nunca más. Con la tristeza que Él coloco en mi corazón por haber hecho aquello pedí a Dios perdón por ese gran error, luego pedí perdón a mis padres, “La tristeza que proviene de Dios produce el arrepentimiento que lleva a la salvación, de la cual no hay que arrepentirse, mientras que la tristeza del mundo produce la muerte”, 2 Corintios 7:10-11.
Pero todo lo que me llevó a hacer las cosas correctamente fue por la guía del Espíritu Santo, quien en todo momento me alertaba de mi error, como agradezco a Dios por haberme dado ese gran regalo que es Su Espíritu en mi vida. Y hoy en día hago las cosas de la manera que a Él le agrada y con el temor de no fallar aunque sé que soy un ser humano propenso a cometer errores, sé que Dios siempre estará conmigo para mostrarme el camino correcto, siempre y cuando obedezca a esa voz en mi interior hablando y diciéndome por donde ir. “Porque el que me envió, conmigo está; no me ha dejado solo el Padre; porque yo, lo que á él agrada, hago siempre”. Juan 8:29. Hacer lo que a Él le agrada nos garantiza que jamás estaremos solos, y la obediencia es una de las cualidades que el siervo de Dios siempre debe buscar tener.
Que Dios los bendiga mucho.

jueves, 24 de febrero de 2011

Creciendo con Dios

Así como yo, y todos ustedes ya fuimos bien chiquitos, tan chiquitos que cabíamos en los brazos de mamá, pero crecimos y no somos más aquellos bebecitos. Así como crecimos físicamente, necesitamos también crecer con Dios, y solamente a través de la Palabra de Dios eso puede acontecer.
Cierta vez Salomón dijo: “Escucha al sabio y crece en prudencia; y el instruido adquirirá habilidad”. Él quiso decir que la Palabra de Dios nos ayuda a dar valor a la sabiduría y a los buenos consejos y a entender los pensamientos de Dios que tiene para nosotros. La Palabra de Dios también nos enseña a vivir de manera inteligente y a que seamos correctos, justos y honestos con las personas. Actuando así creceremos a cada día en la presencia de Jesús.
Y por hablar en Jesús, ¿Ustedes sabían que Él también fue un niño? Así como ustedes van a la escuela, juegan, hacen tareas de la casa… Con Jesús también fue así. Él hacia todo los que ustedes hacen. Él comía, tomaba baño, estudiaba y jugaba igual que ustedes. Él también tuvo una familia y hasta hermanos, después que Él nació, María, su mamá, tubo otros hijos. José su padre, era carpintero y hacia muebles de madera y, seguro que, Jesús lo ayudaba en algunas tareas. Pero Él siempre reservaba una hora por día para aprender los enseñamientos de Dios y desde pequeño tenía el placer de agradar a Dios. Por causa de eso, a cada día crecía, y se fortalecía y se tornaba sabio y Dios siempre estaba junto de Él.
Desde niñito, Él predicaba para los adultos. ¡Sí! Él leía muchos las Sagradas Escrituras y por eso conseguía hablar de las cosas de Dios para los médicos, profesores y para las personas muy inteligentes, porque la sabiduría de Dios estaba sobre Él, así como ocurrió cierta vez cuando María y José viajaron de Nazaret a Jerusalén para conmemorar las fiestas de Pascua. Todos los años él hacia esto, pero en aquel año Jesús fue junto. La fiesta termino y la familia de Jesús estaba volviendo para la casa cuando se dieron cuenta que Él no estaba. Entonces María y José volvieron afligidos para buscar a Jesús y solo después de tres días que Lo encontraron en el templo, sentado hablando con los doctores. Todos estaban sorprendidos con Su inteligencia. Jesús conseguía hablar de las cosas de Dios a los adultos, mismo siendo niño.
El secreto para que crezcamos con sabiduría es obedecer y meditar en la Palabra de Dios. Jesús fue un niño muy obediente que se interesaba por los enseñamientos bíblicos, por eso creció agradando a Dios. Necesitamos separa un tiempo de nuestro día para fortalecer nuestra fe a través de la lectura de la Biblia. Y no se olviden de agradecer a Jesús por darnos la oportunidad de crecer en Su presencia.

lunes, 31 de enero de 2011

LAS REPRENSIONES

¿Quien alguna vez no recibió una reprensión por algo que hizo mal? Muchas veces nos reprenden justamente y a veces no. Pero lo importante ante esas situaciones es actuar maduramente.
En mi primera reprensión sentí que me moría y de a poquito sentía que mi tamaño disminuía progresivamente a medida que me retaban por lo que había hecho, mi cara se calentaba y ponía colorada, mis manos transpiraban y quería salir corriendo pues en el momento  que me estaban corrigiendo el error, dentro mío decía “juro que ya aprendí no me reten, no lo voy a volver a hacer, lo prometo” pero era necesario que me dijeran donde estaba el error y no solo reaccionar por inercia sin saber en qué había fallado y obedecer como un muñeco manejado por otros. Ahí es donde apareció la persona a la que temía no con temor de miedo sino con respeto, para decirme que las cosas estaban mal, hasta me pidió que le dijera que es lo que había entendido en esos veinte minutos hablando con él, solo para estar seguro si yo había comprendido la enseñanza de ese día y el porqué de aquella reprensión constructiva. Al momento que él me hablaba yo lo veía como si él fuera mi padre que no quería que me pasara nada, que quería que yo creciera bien, mas allá de verlo enojado sentía un gran cariño, porque él quería lo mejor para mí. No voy a negar que paso un día y no me quería ni aparecer por el lugar, llena de vergüenza y timidez, pero cuando llegué su querida y amable esposa me hablo con voz tan tierna diciendo que eso era una enseñanza y que iba a crecer mucho, que debía ser madura y no sentir lo que sentía en ese momento. Pues todos recibimos una reprensión alguna vez y nos sirve para no volver a cometer esos errores que al principio no se ven serios pero con el tiempo pueden tornarse la causa de nuestras caídas.
Sé que mirar con buenos ojos en ese momento es difícil pero el que tiene  a Dios dentro suyo, no consigue sentir resentimientos ni rencor contra aquella persona, pues para mantenernos puros, limpios delante de Dios debemos y es necesario hasta mirar con ojos de niño, a los que muchas veces les duele que los reprendan pero uno como padre sabe que es lo mejor para ellos, y ellos en el futuro se lo agradecerán. Pues es así para el que quiere crecer en la Fé. “Porque el Señor al que ama, disciplina, y azota a todo el que recibe por hijo”. HE.12.6
Porque eso pasó para que abrieras los ojos, si no hubiese sido por esa reprensión talvez hubieras terminado de la peor manera más adelante, pero como Dios cuida de vos Él se preocupa para enviarte a alguien que te oriente y muestre el error cometido, pero no cabe duda que el mejor que puede orientarnos es el Espíritu Santo. “pues si nuestro corazón nos reprende, mayor que nuestro corazón es Dios, y él sabe todas las cosas. Amados, si nuestro corazón no nos reprende, confianza tenemos en Dios”  1 Jn 3:20:21

lunes, 17 de enero de 2011

Los ojos espirituales

Muchas veces me preguntaba porque la gente puede hacer tanto daño. Pero esas preguntas surgían cuando no conocía a Dios, cuando no conocía lo que realmente estaba oculto a los ojos carnales.
La semana pasada mi papá estaba muy preocupado y nervioso, hizo que todos en casa se pusieran igual por causa de los problemas que tenía; no voy a negar que por un momento, cuando había conseguido que todos se enojaran casi lo consigue conmigo, pero algo en mi habló más fuerte que las ganas de tirar todo y ser un problema mas dentro de casa. Esa voz me dijo que ese no era el hombre que yo conocía, ese padre amoroso que cuidaba de mí y de mi familia con tanta dedicación sino es un espíritu que quiere traer discordia y divisiones. Muchas veces no conseguimos ver que el diablo usa siempre a gente de nuestro alrededor y más a nuestra familia para que nosotros avergoncemos el nombre de Jesús por eso hay que tener los ojos bien abiertos para no dejar que el diablo consiga sus propósitos, porque al igual que él, nosotros también tenemos uno y es glorificar a Dios con nuestro comportamiento, nuestro corazón y nuestras vidas.
Recuerdo que ese día hice lo que más nadie pudo conseguir. Luego de que Dios habló a mi corazón yo solo sonreí y seguí haciendo las cosas como si no hubiera pasado nada. También llevé esa paz que Dios me había dado para todos en mi familia y eso es lo que ustedes deben hacer pues los siervos de Dios llevan paz a sus hogares, son un reflejo de Dios a donde quiera que vayan.
Es fácil? Claro que no. Pero que galardón tendríamos delante de Dios si solo haríamos las cosas que menos nos cuestan hacer? De ahí es la importancia de tener el Espíritu Santo porque el siempre está hablando a nuestro corazón, guiándonos, exhortándonos y en los momentos de más dificultad él esta presente recordándote que en esa tempestad no estas solo, que aunque muchas veces pienses que no vas a poder, que es difícil, no te preocupes pues él tiene en control de todas las cosas.
Consejo: Cuando todos te provoquen para que reacciones de la peor manera, en primer lugar no lo mires con ojos carnales viendo a la persona que te esta agrediendo, sino mira mejor al espíritu que esta actuando en lo oculto. Y esos momentos que quieras responder y hasta sentirte mal por aquella agresión haz una pequeña oración en silencio y pide a Dios fuerza para que “No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el mal” Romanos 12:21.